LA FUERZA DE LA NATURALEZA
Una fuerza de la naturaleza es un fenómeno natural, que no se puede controlar.
Tú, eres una fuerza de la naturaleza.
Eres un fenómeno natural y no puedes ser controlado.
El año solar está compuesto por cuatro estaciones y cada una de ellas tiene una resonancia .
Cada estación nos permite reconocer el flujo de energía estacional y honrarlo,
Dedicar un tiempo el primer día de cada estación sobre los cambios energéticos que se perciben en el entorno es importante, sentir las subidas y bajadas de energía, el flujo y el reflujo, los diferentes aroma, tonos de cada estación y todo lo que puedas percibir es clave para sintonizar con la naturaleza. La naturaleza tiene ritmos y nosotros también.
Armonizar significa emparejar los ritmos personales con el entorno. De esta forma maximizamos la interacción con la naturaleza y podemos comunicarnos con ella.
El tiempo ejerce una gran influencia tanto en entorno como en tu propia energía personal. La vegetación crece y se repliega siguiendo su esquema anual, igual que los animales también siguen sus patrones de conducta determinados.
A medida que cambia el ángulo y la distancia de la Tierra con respecto al sol, el ciclo estacional va reflejando la relación entre la luz y la oscuridad. En ese ciclo natural el concepto de oscuridad es necesario, en ella no puede haber periodo inactivo en el que la tierra recupere fuerzas, al igual que las semillas no germinarían y los animales no criarían en el momento adecuado.
Las estaciones nos ofrecen oportunidades tanto prácticas, como espirituales para aprender más cosas acerca de la naturaleza y vivir con ella
Las estaciones son como etapas de la vida, donde la naturaleza cíclica se refleja en relaciones, trabajos, experiencias con las que vamos aprendiendo a crecer. Así que, lo que ocurre en la Madre Naturaleza también ocurre en nuestros cuerpos a través de la vida y de la muerte ya que somos cíclicos y hemos de dejar que nuestra naturaleza cíclica nos guíe.
Eres tú, quien tiene que devolver la armonía y el equilibrio al universo y a la sabiduría de la Madre Naturaleza
Celebremos el equinoccio de otoño, (Mabon)
20 al 23 de Septiembre en él hemisferio norte y
21 al 23 de Marzo en el hemisferio Sur
Todo el mundo reconoce la sensación que suele acompañar al otoño, el ambiente se vuelve más pesado, más turbio y se percibe algo diferente en el aire.
El otoño es un momento de equilibrio, una melodía que toca el sol y llega justo en línea, la balanza (el equilibrio)
En el otoño el día y la noche, duran exactamentel lo mismo. La potencía del sol va en declive y una vez más llega la oscuridad.
El otoño se asocia tradicionalmente con el fin de la cosecha y es el momento para observar la abundancia que nos rodea antes de adentrarnos en la oscuridad y esperar la transformación que se nos ha prometido.
Es una epoca donde se nos permite comenzar a transformarnos en nuestro nuevo yo más pleno verdadero y celebrar todo lo qe tenemos y lo ha de venir, ese, es el día de Acción de Gracias, cuando le damos las gracias al universo por toda la abundancia que se nos ha proporcionado.
El otoño incorpora ideas de sacrificios, perdidas y lamentos suaves.
Es una época de sopesar ¿Qué tenemos que mantener?
¿Qué podemos dejar atrás?
Es un momento maravilloso para meditar, reflexionar, soltar, y celebrar.